El dolor de espalda no sólo les ocurre a personas con estilos de vida sedentarios. Esta condición ocurre cuando la tensión en la columna aumenta a medida que envejecemos o durante el trabajo duro. Si el dolor aparece de vez en cuando, no es necesario ningún tratamiento. Pero si el dolor es regular, debes consultar a tu médico. El tratamiento se elige en función de la causa patológica identificada: medicación, fisioterapia y, a veces, cirugía.
Razón
Para determinar la causa del dolor de espalda, es necesario analizar cuándo y en qué circunstancias se produjo el dolor de espalda:
- Dolor matutino. Generalmente ocurre después de despertarse. Puede producirse un dolor intenso cuando una persona cambia de posición, levanta un brazo o gira el cuello. En la mayoría de los casos, esto no tiene nada que ver con la columna, sino que es causado por miositis (inflamación de los músculos causada por hipotermia, estrés y enfermedades infecciosas). En este caso, el médico le recetará algunos ungüentos calientes, incluidos los que contienen AINE. Si la inflamación también afecta las articulaciones, su médico puede recetarle condroprotectores, medicamentos que restauran el tejido.
- Dolor al esfuerzo. Se producen al caminar, durante largos periodos de tiempo o, por el contrario, con la falta de ejercicio. Generalmente el dolor es sordo pero bastante intenso y desaparece sólo cuando se retira la carga, pero a veces se vuelve constante. En este caso, es necesario consultar a un médico. Un especialista podrá identificar la causa del malestar: espondilolistesis, estenosis espinal u osteocondrosis.
- Hacia el final de la jornada laboral, es posible que sienta un tirón en el cuello. Se acompañan de un crujido que empeora después de un tiempo; estos son síntomas de osteocondrosis de la columna cervical. No existe una cura completa para esta enfermedad. Pero hay alivio del dolor disponible. En la fase aguda, se pueden usar medicamentos antiinflamatorios no esteroides y, si no son útiles, se pueden usar corticosteroides.
La distrofia del disco puede ocurrir a medida que envejecemos. Esto significa que pierden su capacidad de absorción de impactos, provocando dolor de espalda. En este caso, se prescriben antiinflamatorios no esteroides y condroprotectores. Su médico puede recomendarle ejercicios terapéuticos especiales para ayudar a fortalecer los músculos de la espalda. La distrofia discal no debe confundirse con la hernia; este último se caracteriza por hernias vértebras. En casos severos, se requiere tratamiento quirúrgico.
Los medicamentos y otros tratamientos conservadores para las hernias pueden mantener la calidad de vida de los pacientes en un alto nivel. Pero en los casos más graves, cuando los antiinflamatorios o los corticosteroides no logran aliviar el dolor y hay disfunción en el sistema genitourinario, se realiza una cirugía de hernia. La probabilidad de que el dolor persista incluso después de la cirugía no supera el 1,5%.
El dolor de espalda puede ser causado por una lesión. Esta condición se produce debido a un esguince de los ligamentos que sostienen la columna, lesión que puede ocurrir durante la práctica de deportes y levantamiento de pesas. La lesión de las vértebras puede provocar osteoporosis, una enfermedad que hace que el tejido óseo se adelgace. La patología en sí no causa dolor, pero puede provocar fracturas de las vértebras.
depende de la ubicación
Es importante determinar dónde está el dolor: en la espalda media o baja. A veces esto ayuda a comprender qué parte de la columna está causando el problema y puede indicar otras patologías que causan síntomas similares. El dolor en la zona media de la espalda no sólo se debe a la osteocondrosis sino que también puede ser causado por una enfermedad gástrica o pancreática.
El dolor de espalda, localizado en el lado derecho o izquierdo, no está necesariamente relacionado con una enfermedad de la columna. A veces, esto es un síntoma de patología renal: una enfermedad infecciosa o la presencia de cálculos en ella. La ecografía ayudará a establecer un diagnóstico preciso. El tratamiento adicional depende de la causa patológica: combatir la infección con antibióticos y extirpación quirúrgica de los cálculos renales.
A veces, el dolor de espalda puede ser causado por una afección ginecológica, como la endometriosis, el crecimiento del revestimiento del útero fuera de la cavidad uterina. Pero en algunos casos, incluso puede afectar a los órganos abdominales, provocando que las terminaciones nerviosas se compriman. En este caso, comienza el dolor de estómago. Si se produce dolor en la zona lumbar, se debe consultar a un ginecólogo. En la mayoría de los casos, la endometriosis debe tratarse de forma conservadora, pero a veces se requiere intervención quirúrgica.
El dolor de espalda puede ocurrir durante el embarazo. Su aparición puede deberse a una mayor carga sobre la columna y a cambios hormonales, que provocan la relajación de los músculos. Los AINE suelen estar contraindicados en mujeres embarazadas y, en algunos casos, incluso los masajes. Los ejercicios terapéuticos especiales para mujeres embarazadas pueden tener grandes resultados. Para las mujeres embarazadas, las mejores opciones son los aeróbicos acuáticos y el yoga. Es importante eliminar la tensión adicional en la espalda.
El dolor también puede ser causado por problemas en las articulaciones. Los más comunes son varios tipos de artritis. La enfermedad suele ser contagiosa y requiere antibióticos.
Tratamiento y Prevención
Si el dolor es causado por una sobrecarga física o se produce en el contexto de hipotermia y enfermedades infecciosas, entonces el dolor puede desaparecer por sí solo. Se pueden usar medicamentos antiinflamatorios para acelerar la recuperación. No se deben usar apósitos térmicos ni cinturones de lana. En su lugar, es mejor utilizar un corsé elástico especial.

Los vendajes especiales diseñados para mujeres embarazadas pueden ayudar a aliviar la presión en la espalda. Pero si, a pesar de todas las medidas, el dolor no desaparece en tres días, es necesario consultar a un médico.
La automedicación no debe realizarse bajo ninguna circunstancia, especialmente masajes y procedimientos de calentamiento como baños o saunas; esto solo aumentará la hinchazón y el malestar.
El tratamiento es integral: se toman medicamentos antiinflamatorios no esteroides para aliviar el dolor y al mismo tiempo reducir la carga en la columna. Esto se aplica especialmente a las personas con sobrepeso; necesitan seguir una dieta con valores energéticos más bajos.
Además, los médicos suelen recetar diversos tratamientos físicos: magnetoterapia, masajes. Si el dolor es causado por la destrucción del tejido articular, entonces es necesario tomar condroprotectores adicionales, medicamentos a base de sulfato de condroitina y glucosamina, que restauran las articulaciones y promueven la producción de colágeno.
Para prevenir esta enfermedad es importante seguir las siguientes recomendaciones:
- No puedes quedarte quieto durante largos períodos de tiempo. En esta posición, la columna está sometida a mucha carga.
- Deben evitarse las cargas verticales sobre la columna.
- Se deben fortalecer los músculos de la espalda para brindar apoyo adicional a la columna.
- Si presentas dolor intenso y persistente debes consultar a un especialista.

























































































